La «Biblioteca»: recursos para buscar y utilizar información y contenidos digitales existentes

El gran almacén de recursos digitales a disposición del docente en la red constituye lo que hemos entendido como la “Biblioteca”. Se trata de un contenedor de capacidad infinita del que el profesor dispone cuando necesita buscar contenidos que faciliten su proceso didáctico y, obviamente, utilizar después estos recursos en la práctica cotidiana.

De una parte, se proponen aquí algunas referencias a la búsqueda en sí, como primer paso en el camino del conocimiento de los recursos. Buscadores de diversos tipos de contenidos, desde la información en bruto, a las imágenes, el audio o los vídeos, son el primer paso para abrir nuevas referencias que nos sean útiles en la docencia. En un paso más, podemos necesitar también conocer herramientas específicas y, por ello, se analizan algunos buscadores de utilidades que nos conectan con el escenario de la “Factoría” que se propone en el siguiente bloque.

Por otro lado, una vez asimilado el manejo de los buscadores, los recursos en sí de utilidad para las Ciencias Sociales disponibles en la red son de tan amplio espectro que los hemos sintetizado en grandes ejes de contenidos, no siempre estancos, sino más bien difusos y con referencias múltiples e interrelaciones. Desde los elementos de utilidad más amplia como las Webs y los recursos educativos generales, se propone una mayor concreción en las Ciencias Sociales, diferenciando referencias institucionales, recursos del propio profesorado, cada vez más presente en este sentido, y otro tipo de elementos de la red que son de utilidad concreta en este campo. Finalmente, se alude a recursos específicos para cada Área de Conocimiento (Geografía, Mapas e Información Geográfica, Historia e Historia del Arte) y se aporta una referencia transversal como es la de los Juegos Online, con múltiples capacidades para todas ellas.

La “Biblioteca” es el primer paso para iniciarse en la cultura del aprendizaje de la red, y para poder aprehender los contenidos que nos proporcionan sus recursos hay que buscar en sus ficheros y “leer” adecuadamente los resultados. Es sin duda, el primer paso, para mejorar la docencia con elementos preelaborados pero que resultan de especial ajuste a las necesidades de cada etapa. La mayor parte de estas aplicaciones nos inician, además, en el proceso de crear contenidos, ya que de las referencias ya elaboradas surgen normalmente nuevas ideas para generar recursos propios.